Nos trasladamos a un lugar en el que seguramente se producirán en los próximos años los cambios mas importantes de esta ciudad, transformaciones a diferentes escalas y que influirán sobre una gran parte de los ciudadanos.
Por un lado actúa la administración la cual quiere sacar el máximo rendimiento a las operaciones, y hace caso relativo a las demandas de los residentes del barrio que, representados por las diferentes asociaciones, aceptan esa transformación urbanística y desean encaminarla de manera que produzca un mayor beneficio para los vecinos y que el distrito no se vea con carencias con la llegada de un número importante de personas.
En este contexto cabe destacar la aportación de Xavier Basiana, un arquitecto y vecino que trabaja desde el conocimiento del barrio y aboga por una ordenación que responde a las demandas de los vecinos a la vez que respeta la implantación del nuevo centro, previendo un equilibrio entre las diferentes actividades lo cual garantiza el buen funcionamiento del conjunto y la integración con lo existente.
Sin duda vivimos un proceso en ebullición y que se puede comparar con los grandes eventos acontecidos en la ciudad en años anteriores, esto nos da la oportunidad de reflexionar sobre el papel que jugamos como arquitectos en la transformación de la ciudad y nos sirve para darnos cuenta de cuan importantes son las decisiones que tomemos para el bienestar de los ciudadanos.
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